Título : |
Ladislao Mazurkiewicz : el arco, su mundo |
Tipo de documento: |
texto impreso |
Autores: |
Eduardo Rivas, Autor |
Editorial: |
Montevideo : Fin de Siglo |
Fecha de publicación: |
2013 |
Número de páginas: |
227 p |
Il.: |
fotos |
ISBN/ISSN/DL: |
978-9974-49-654-5 |
Idioma : |
Español (spa) |
Palabras clave: |
BIOGRAFIA |
Clasificación: |
M BIOGRAFÍAS |
Resumen: |
En 1965, Peñarol intentaba alcanzar su cuarta final de la Copa Libertadores, que apenas llevaba 5 años de existencia.
Para alcanzar ese objetivo, los aurinegros debían superar a una máquina de jugar al fútbol: el Santos de Pelé.
Las cuentas estaban igualadas, pues los brasileños habían vencido en su tierra y los uruguayos festejaron en la revancha. El tercer partido fue fijado en el estadio Monumental de Buenos Aires, pero un hecho inesperado, sucedido en la concentración de los aurinegros, hizo que debutara oficialmente en el arco mirasol un joven de veinte años recién cumplidos. A los pocos minutos de iniciado el pleito, todos comprendieron que en esa ubicación surgía un guardameta diferente, llamado a marcar época.
Colocación, serenidad, firmeza y solvencia: algunos de los atributos que marcaron una carrera que asombró a nivel mundial, hasta ser considerado el mejor de todos.
Mazurkiewicz, hijo de un polaco y una española, supo, desde el primer momento, que en esa zona de la cancha de fútbol era casi invencible. Allí vivió, allí se hizo leyenda. Habrá sido así porque el arco fue su mundo |
Ladislao Mazurkiewicz : el arco, su mundo [texto impreso] / Eduardo Rivas, Autor . - Montevideo : Fin de Siglo, 2013 . - 227 p : fotos. ISBN : 978-9974-49-654-5 Idioma : Español ( spa)
Palabras clave: |
BIOGRAFIA |
Clasificación: |
M BIOGRAFÍAS |
Resumen: |
En 1965, Peñarol intentaba alcanzar su cuarta final de la Copa Libertadores, que apenas llevaba 5 años de existencia.
Para alcanzar ese objetivo, los aurinegros debían superar a una máquina de jugar al fútbol: el Santos de Pelé.
Las cuentas estaban igualadas, pues los brasileños habían vencido en su tierra y los uruguayos festejaron en la revancha. El tercer partido fue fijado en el estadio Monumental de Buenos Aires, pero un hecho inesperado, sucedido en la concentración de los aurinegros, hizo que debutara oficialmente en el arco mirasol un joven de veinte años recién cumplidos. A los pocos minutos de iniciado el pleito, todos comprendieron que en esa ubicación surgía un guardameta diferente, llamado a marcar época.
Colocación, serenidad, firmeza y solvencia: algunos de los atributos que marcaron una carrera que asombró a nivel mundial, hasta ser considerado el mejor de todos.
Mazurkiewicz, hijo de un polaco y una española, supo, desde el primer momento, que en esa zona de la cancha de fútbol era casi invencible. Allí vivió, allí se hizo leyenda. Habrá sido así porque el arco fue su mundo |
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